...y desayunos sin prisas.

Si hay algo de lo que de verdad se disfruta cuando estás de vacaciones, es de tomarte el desayuno tranquilamente... sin mirar el reloj y beberse el café de pié.
Sentarse en la terraza cuando el sol todavía es una caricia, con un libro o una conversación amena, tu mermelada favorita y toda la mañana por delante. ¿que más se puede pedir?.